El verano en Lima

El verano en Lima es siempre increíblemente lleno.

Lleno da calor pegajoso
de sombrillas de colores
de gente y más gente que hay que esquivar para pasar
de Dragón lleno de buena música
de bailar hasta que el sol de día te recuerda que debes dormir
de cebiches para mí sin pescado
de buenos amigos y muchas risas
de gente nueva e interesante
de gente que sólo ves en verano porque en invierno se enfría
de nuevos amores, probablemente sólo de verano o tal vez no
de resacas mañaneras que las chelas del día siguiente por la mañana saben muy bien cortar
de flojera de regresar cada domingo en la noche
de ilusión desde el lunes de que ya sea viernes
de planes
del chilcanos para los previos
de latas de cerveza en el carro que nos lleve al sur
de sunsets bonitos y paseos por la playa

de relajo y diversión.

Quisiera que los veranos de Lima nunca acaben.

Pero acaban
cuando ya te provoca un poco de invierno barranquino
y luego te llenas de la ilusión del siguiente verano por venir

Si este fuera mi último verano en Lima
lo disfrutaría como nunca lo he disfrutado.